Y como todo llega, llega la Fira del Trapezi de Reus, parecíamos pequeños huracanes en medio de tanta compañia ya consolidada.
Empezamos por colgar el trapecio en un pórtico de nueve metros..., sentíamos que habíamos dejado la seguridad de escuela, y que ahora empezábamos andar solas, que felicidad y melancolía sentíamos.
Trapecio colgado, reunión de artistas, y orden de aparición de los números. Y ya estábamos preparadas para el cabaret nocturno de la Palma (plaza de Reus). Sumámos en total dos actuaciones en la Palma y dos itinerantes diurnos.
La experiéncia fue brutal, a nivel de equipo, de público y de energia. Fue un regalo inmenso para unas CAPGIRADES recién llegadas del otro lado del charco.
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